Nos ponemos al día gracias principalmente a este artículo escrito por una gran profesional dedicada desde hace años a informarnos sobre fraude alimentario. Es experta internacional y tiene su propia web donde escribe artículos que personalmente leo con mucho interés, además de escribir asiduamente en revistas relacionadas. El artículo original, lo podeis encontrar aquí: www.globalfoodsafetyresource.com
En este blog, os presento un resumen en español de su artículo:
El fraude en los envases de alimentos va en aumento. Y sí, está considerado como otra forma de fraude alimentario
Las cadenas de suministro de alimentos se han visto sometidas a gran tensión durante el año 2022, debido a los efectos de la guerra de Ucrania, la escasez de fertilizantes, la inflación y las condiciones climáticas no favorables, afectando de lleno a algunos de los mercados principales.
Los operadores alimentarios sufren esa tensión con escasez de ingredientes, y aumento de los costes de materiales, energía y mano de obra. La presión continuada sobre las cadenas de suministro hace que la motivación de proveedores y productores para la compra-venta de ingredientes o productos fraudulentos aumente de forma significativa, afectando también a los materiales de envasado.
El fraude en los materiales de envasado
Estos materiales son componente importante de cualquier alimento terminado, sobre todo cuando están en contacto directo con el mismo. Es por ello que los materiales en contacto directo deben incluirse siempre en los planes HACCP y VACCP, y se consideran dentro de los planes de control de fraude.
Uno de los problemas emergentes ha sido el incremento en la demanda de materiales reciclados por parte de empresas privadas y algunas instituciones que han establecido objetivos muy ambiciosos, propiciando que la demanda supere la oferta, e incrementando así el riesgo de fraude.
Los materiales para contacto con alimentos se elaboran a partir de materias primas con un elevado porcentaje de pureza y por tanto, los sistemas de reciclaje requieren controles de calidad bastante sofisticados para asegurar el cumplimiento del grado requerido. No todos los operadores del sector del reciclaje estarán dispuestos a alcanzar esos niveles de pureza. Este hecho, junto con el aumento de la demanda de materiales reciclados, hace aumentar significativamente el riesgo de incumplimiento y fraude. Mucha atención a la aptitud alimentaria y grado de pureza de los materiales reciclados!
Además, los costes de las resinas principales utilizadas en la producción de materiales de envasado de alimentos se han incrementado considerablemente (hasta un 49%), aumentando la oportunidad y la motivación para obtener beneficio económico. Como sabemos, la migración de partículas tóxicas hacia el alimento (y por tanto al consumidor) es un problema real si se incumplen los límites máximos establecidos por ley.
Los fraudes en envases pueden detectarse en la frontera mediante los controles correspondientes, aunque los materiales de envasado a fecha de hoy, no están dentro de los principales objetivos de control en los puestos de inspección fronterizos, y por tanto muchos de los fraudes existentes, podemos pensar que pasan totalmente desapercibidos.
ALGUNOS EJEMPLOS DE FRAUDES A TENER EN CUENTA EN ENVASES:
- Resinas no aptas para uso alimentario;
- Uso de recubrimientos plásticos y aditivos no autorizados;
- Colorantes no autorizados en lugar de colorantes autorizados;
- Informes de laboratorio falsificados en lo que se refiere a migración de partículas;
- Declaraciones falsas sobre el grado de pureza de las resinas recicladas empleadas;
- Declaraciones falsas sobre la concentración de componentes reciclados en el envase terminado.